Parecía imposible allá por la década de 1980, pero hoy en día, y desde hace ya bastantes años, la celebración de Halloween es una tradición plenamente instaurada en España. Aun así, muchas personas no tienen claro cuál es su origen. De hecho, si has llegado hasta aquí, es muy posible que tú seas una de ellas. Tranquilo, en Storemore te lo vamos a contar.
El origen de Halloween
Según un estudio histórico elaborado por la Universidad de Oxford, Reino Unido, el origen de Halloween se remonta a más de 3000 años en el tiempo. En concreto, se encuentra en un evento llamado Samhain, que era celebrado por los pueblos celtas con el propósito de festejar su año nuevo.
El año nuevo celta tenía lugar el día que, actualmente, corresponde al 1 de noviembre. Durante la víspera, estos pueblos y tribus creían que los espíritus bajaban a la Tierra procedentes del más allá junto a otras muchas criaturas. Lo hacían junto al dios del Sol (Lugh), el cual era despedido hasta la próxima primavera.
Durante esta celebración, las personas que integraban las comunidades celtas se disfrazaban usando pieles de animales y se reunían alrededor de las hogueras. También iban disfrazados de casa en casa pidiendo comida, en lo que hoy podemos considerar como una forma primitiva del clásico truco o trato.
Tal y como sucedió con otras muchas fiestas paganas, el Samhain fue transformado por las autoridades cristianas. Es más, se fusionó con la Fiesta de la Cosecha romana en el siglo VII, cuando el papa Bonifacio IV decretó que el 1 de noviembre sería el día de Todos los Santos. A partir de ahí se le dio su nombre actual.
Halloween es una palabra que deriva de la expresión inglesa All Hallow’s Eve, que podría traducirse al español como «víspera de Todos los Santos». Con el paso de los siglos, la fiesta cuajó, sobre todo en México, Estados Unidos y Canadá. Tanto que, hoy en día, gran parte de la estética y de las maneras de celebrarla en todo el mundo son las típicas de estos países.
Los mejores disfraces de Halloween
Como es obvio, cada año está sujeto a determinadas modas y tendencias que, generalmente, están relacionadas con ciertos éxitos televisivos. Todos recordamos haber salido a la calle en los últimos años y habernos encontrado a multitud de mujeres vestidas como Harley Queen o Miércoles, así como a hombres con la careta del asesino de Scream o de La Purga.
Sin embargo, hay otros terroríficos disfraces que han mantenido su popularidad a lo largo de las décadas y los siglos. En este sentido, el más popular entre ellos es, sin lugar a dudas, el de bruja. Piratas, esqueletos y zombies son otras alternativas con un gran arraigo y tradición que, además, nunca fallan. Dicho de otro modo, son ideales para quienes no quieren arriesgar.
En cualquier caso, comprar un disfraz es casi siempre una inversión económica importante. Asimismo, es una pena utilizarlo una sola vez y después deshacerte de él por no tener espacio suficiente en casa para guardarlo. Esto es algo que no tendrá por qué ocurrirte si alquilas un trastero en Storemore con el tamaño acorde a tus necesidades.
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